El Budismo como estilo de vida en Tailandia

Para entender el Budismo como base de una buena alimentación primero tenemos que entender el estilo de vida en Tailandia, sus principios, sus referentes y conceptos. El objetivo principal es enfocar nuestra nutrición desde nuestro pensamiento y, para eso, vamos a sumergirnos en sus pilares.

El 95% de la población tailandesa es budista. Esta religión está enfocada hacia el crecimiento personal y la expansión de las buenas prácticas. Su referente es Buda, Siddharta Gautama, el príncipe que abandonó su vida llena de privilegios para llevar una vida de austeridad y meditación. Consiguió librarse del Samsara, rueda de sufrimiento que nos persigue en una y otra vida, para conseguir el Nirvana, la paz interior. Y el camino que te lleva hacia allí es la consciencia. Ese hombre feliz es para los budistas un ejemplo a seguir para liberarse y vivir con la ausencia de toda perturbación, de todo deseo, ya que solo nos satisface momentáneamente. “Más que una religión o algo estrictamente oriental, el budismo busca la manera de que todos seamos un poquito más humanos”, comentan desde Casa Asia. Lo importante es abrir los ojos y saber, cada uno, cómo enfocar nuestra vida para conseguir esa tranquilidad. Aquí, en Occidente, tenemos nuestras alternativas como puede ser el yoga, la meditación, el zen, el mindfulness… Al final, las bases son distintas pero el objetivo el mismo.

Sitting buddha

Gautama Buda señaló 4 verdades fundamentales, las 4 nobles verdades, que pueden aplicarse para mantener esta actitud ante la comida.

• “La existencia es sufrimiento” (La verdad del sufrimiento).
• “El deseo provoca el sufrimiento” (La verdad del origen del sufrimiento).
• “Elimina la causa del sufrimiento y el sufrimiento dejará de existir” (La verdad de la extinción del sufrimiento).
• “El camino de las ocho vías es la forma de eliminar el deseo” (La verdad del camino).

Y, para la cesación del sufrimiento, existe un método, el Óctuple Sendero, que te ayuda a tratar a tu cuerpo como si fuera un templo. La comprensión correcta es esencial, identificar lo alimentos que te benefician y perjudican, que debe alinearse con la aspiración correcta, visualizar quién y cómo quieres ser, física y emocionalmente. Entonces, entra en juego el habla correcta y la acción correcta para considerar lo que comes y cómo lo comes. Reciclar las sobras y proteger los nutrientes importa, y mucho. Al igual que perseguir el modo de vida correcto, no matar (en este caso, matar las emociones a través de la comida), no robar y no abusar (no consumir más cantidad de la que necesitas). El esfuerzo correcto también es de gran importancia. Pensar en el tiempo que dedicas a cocinar, ni obsesionarte ni pasarte a la comida rápida. La atención y la concentración correcta son los dos últimos puntos de los principios del Óctuple Sendero. Tener la capacidad de detectar cuándo tienes hambre y cuándo no, saber qué nutrientes necesitas y evitar el resto evitando, a la vez, el deseo transitorio.

Ceremonia en templo antes del almuerzo

Somos lo que comemos:

Podemos cambiar nuestros hábitos y sustituir algunos alimentos que no nos benefician por otros que sí, controlando nuestro apego a éstos. Conocer nuestro cuerpo para prevenir el envejecimiento prematuro, cómo lo hacen en el mundo Oriental, hace ya muchos años. Desde aquí, debemos darle más importancia a la calidad de los alimentos e ingredientes, a su frescura, autenticidad. Valorar los rituales y apoyar una pesca sostenible y el uso de envases reciclados, como hacemos en BOKO. Aprender de la comida asiática y expandirla por el mundo.

Temple food

Para terminar, nos ha parecido interesante mencionar el término Temple Food. Hace referencia a los alimentos que consumen monjes y monjas en los templos budistas coreanos. Ellos mismos los cultivan y consumen solo la cantidad necesaria para sobrevivir. La atención y el modo de vida correcto, según el noble Óctuple Sendero. Y así, viven en harmonía con la naturaleza y cortan las ataduras con la comida. Llegar al “Buda-dharma”, el equilibrio entre mente y cuerpo a partir de la comida en conservas, la fermentación y el ecologismo. Nos ha encantado un artículo de PlayGroundMagazine acerca del Temple Food. Os dejamos aquí el enlace.

Y, recordad, ¡mente sana in corpore sano!

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